La vida real comienza después de la muerte

Hay vida después del sepulcro. Vas a vivir más sabiamente, si vives tomando en cuenta que te vas a morir y que hay algo después.
Los que no son santos en esta vida no querrían despertar al final. Su resurrección será para condenación eterna.
Solo si somos santos seremos resucitados para vida eterna—cuando seremos perfectos, sin enfermedades, tristezas, o tentaciones.
La pregunta decisiva es: eres santo, es decir alguien separado para Dios, consagrado a Dios? Te has arrepentido de tus pecados y te has consagrado a vivir para el Señor?