La palabra presbiteriana también se refiere de manera especial a una forma del gobierno eclesiástico que busca seguir las Escrituras tan exactamente como sea posible.
En el gobierno de una iglesia presbiteriana local, el cuidado espiritual se asigna a los ancianos, o presbíteros (que es sencillamente la palabra griega para "ancianos" en español). Creemos que en el Nuevo Testamento los apóstoles asignaron la administración de las ordenanzas eclesiásticas y la regulación de los asuntos de la iglesia a los titulares de cargo, no a una jerarquía clerical o a la congregación en general (I Pedro 5:1-4). Los ancianos tenían la responsabilidad de los asuntos espirituales, mientras los diáconos tenían la responsabilidad especial de los asuntos temporales de la iglesia (Hechos 6).